Aquí estamos comenzando el año 2015 con firmeza y más noticias de nuestro interés, por lo que este nuevo año lo inicio con un tema relevante, que afecta a muchas personas y que en ocasiones no le dan la importancia que se merece.
Un estudio realizado por médicos del VA Pacific Islands Health Care System, ha encontrado y sugiere, que concentraciones bajas de oxígeno y dormir menos profundamente, podrían ser factores de contribución a cambios en el cerebro que pueden preceder a la demencia en adultos mayores.
Los objetivos de este estudio fueron determinar cómo los trastornos respiratorios del sueño, la hipoxemia nocturna (bajas concentraciones de oxígeno en sangre durante la noche) y cambios en la estructura del sueño en la población mayor, pueden llegar a estar relacionados con los cambios neuropatológicos de la demencia. De forma concreta, los investigadores examinaron lesiones cerebrales (microinfartos; infartos lacunares, que son lesiones de pequeño diámetro localizadas en zonas profundas del encéfalo; atrofia cerebral generalizada, etc) luego de realizar autopsias cerebrales en 167 participantes con una edad media de 84 años, quienes fueron sometidos a un estudio polisomnográfico entre los años 1999-2000 y fallecieron en el 2010, lo que significa 6,4 años desde que se practicaron el examen. Alrededor de un 25% de los pacientes que mostraban concentraciones bajas de oxígeno en sangre, tenían mayores probabilidades de sufrir microinfartos cerebrales en comparación con los sujetos que presentaban niveles más altos de oxígeno (OR: 3,88 IC: 1,10-13,76). De igual forma, quienes presentaban en el registro polisomnográfico menos tiempo de sueño de ondas lentas (sueño profundo y reparador) tenían la tendencia a demostrar atrofia en el tejido cerebral.
Es relevante resaltar que a la fecha existe alguna evidencia que demuestra que las personas que siguen un tratamiento para la apnea del sueño pueden mejorar su rendimiento cerebral y cognitivo. Sin embargo, no hay un claro conocimiento, si al aumentar las concentraciones de oxígeno durante el sueño, se protege o disminuye el proceso de deterioro mental.
Como conclusión, este estudio refleja que las bajas concentraciones de oxígeno nocturnas y una disminución del sueño profundo y reparador, tienen un factor principal en el desarrollo de microinfartos y atrofia cerebral, no obstante no se encontró asociación para las lesiones del Alzheimer y la Demencia de los Cuerpos de Lewy (demencia degenerativa y progresiva).
Luego de analizar esta información, es importante que tengas en cuenta que la apnea del sueño puede traer consecuencias perjudiciales para la salud, por lo que hay que tomar conciencia y actuar inmediatamente. No dudes en preguntarme cualquier inquietud al respecto. Estoy aquí para compartir mis conocimientos y experiencia con todas aquellas personas que padecen alguna enfermedad que se encuentre en el rango de la Neurofisiología Clínica.
¡Buena salud!