Durante el embrazo ocurren una serie de cambios anatómicos, fisiológicos, conductuales y sociales. El embrazo y el periodo posparto están estrechamente ligados al sueño. El sueño al ser un estado lábil, se ve influido y sufre alteraciones en gran medida por los cambios que ocurren durante estas etapas.
Los trastornos del sueño más comunes durante el embrazo son el insomnio, el síndrome de apnea e hipopnea obstructiva durante el sueño (síndrome caracterizado por ronquido y pausas respiratorias durante el sueño https://doctorcristiansanchez.com/que-es-el-sindrome-de-apnea-hipopnea-del-sueno/) y el síndrome de piernas inquietas (trastorno de origen neurológico, en el que se producen unas sensaciones molestas en las extremidades, principalmente las piernas durante el reposo, por ejemplo al permanecer sentado o acostado que cursa con trastorno del sueño).
El insomnio es una queja muy común durante el segundo trimestre del embrazo y se suele intensificar a medida que avanza la gestación. Así, este trastorno de sueño puede estar ocasionado por los cambios ocurridos durante esta etapa y por la incomodidad que causan en la embarazada; entre ellos se encuentran: la dificultad para lograr adoptar una posición adecuada y habitual para conciliar el sueño, el dolor lumbar, los calambres musculares, la incomodidad en ocasiones que provocan los movimientos fetales, las náuseas, el incremento del flujo y frecuencia urinarios. Con respecto al síndrome de apnea e hipopnea obstructiva del sueño la relación es ambigua y en el síndrome de piernas inquietas se estima que aproximadamente el 25% de las embarazadas se ven afectadas por este síndrome debido a la falta de hierro (anemia) durante el embrazo.
